La Urraca Turquesa usa un milpiés como estrategia de eliminación de parásitos externos
Los parásitos externos tienen efectos adversos sobre la supervivencia de las aves, afectando la salud, reproducción y comportamiento social del huésped. Estos suelen adherirse a sus huéspedes, alimentándose generalmente de sangre, plumas o piel. Por lo tanto, las aves necesitan evitar, controlar o reducir estos parásitos.
En este sentido, Pablo Sebastián Padrón, investigador de la Universidad del Azuay y asociado al Instituto Nacional de Biodiversidad (INABIO), observó un individuo adulto de la Urraca Turquesa Cyanolyca turcosa utilizando un milpiés de tamaño medio para frotar activamente su plumaje, lo cual sugiere una estrategia de eliminación de parásitos externos (hormigueo).
Las observaciones de campo se realizaron de manera oportunista durante una caminata por el sendero principal del bosque en el lado norte de la laguna Llaviuco, Parque Nacional Cajas, provincia del Azuay, donde Cyanolyca turcosa es común, y generalmente asociada con bosques y bordes de bosques.
Durante el hormigueo, el ave frotaba al milpiés en su flanco derecho y luego en el izquierdo, en sus partes inferiores y cobertoras infracaudales. Posteriormente, dejó al milpiés en la rama, donde permaneció enrollado. Durante esta pausa, el ave inspeccionó visualmente su plumaje y luego se acicaló, probablemente buscando ver si emergían ectoparásitos debido al efecto de los componentes secundarios tóxicos liberados por el milpiés.
Este comportamiento de acicalarse e inspeccionar se repitió al menos tres veces. Luego, el ave voló a una nueva percha en una rama más alta con el milpiés en su pico. Allí, lo mató picoteándolo y luego se lo tragó. Finalmente, después de comer al milpiés, el arrendajo voló de regreso para unirse a su bandada.
De acuerdo al investigador, se han desarrollado varias estrategias para mitigar los efectos negativos de los ectoparásitos. Un ejemplo es la autoungición, o simplemente “hormigueo”, en la que las aves frotan artrópodos que contienen compuestos secundarios en sus cuerpos para crear un ambiente adverso para los parásitos.
Este comportamiento ha sido reportado para varias especies de aves, la mayoría de ellas paseriformes, que usan el comportamiento de frotar activamente las plumas con insectos para automedicarse con el fin de eliminar ectoparásitos, bacterias y hongos de sus plumajes. Además, el hormiguero puede hacer que los artrópodos sean comestibles al eliminar los compuestos químicos secundarios tóxicos o nocivos que algunos de ellos poseen.
La investigación está disponible aquí: https://doi.org/10.18272/reo.v10i2.3092
El INABIO es una institución que busca generar conocimiento y desarrollar ciencia, tecnología e innovación que requiere el Estado ecuatoriano para garantizar la conservación de su patrimonio natural mediante el uso soberano, estratégico y sustentable de la biodiversidad y sus componentes. De maneras sinérgica, el fortalecimiento de programas y proyectos de investigación, junto a instituciones académicas nacionales e internacionales, permiten alcanzar objetivos estratégicos detallados en la Agenda Nacional de Biodiversidad de Ecuador.
Unidad de Comunicación Social
Instituto Nacional de Biodiversidad, entidad adscrita al Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica